La consultoría ambiental es un servicio que resulta de vital importancia para la sostenibilidad de nuestro planeta, así como para el buen hacer de empresas y organizaciones que, antes de llevar a cabo determinadas acciones que puedan resultar invasivas en un emplazamiento o en un espacio natural, requieren de su asesoría para determinar la viabilidad del proyecto.
Los servicios que llevan a cabo los profesionales de la consultoría ambiental son muy variados, así como los espacios en los cuales trabajan. Las ubicaciones pueden ir desde aquellas de tipo más industrial a otras puramente naturales, como ríos o lagos. En ellos se desarrollarán análisis de diferente tipo según las necesidades de asesoría del cliente, como por ejemplo programas de monitorización ambiental y de caracterización de residuos, pasando por autorizaciones ambientales integradas o evaluaciones de impacto ambiental (tanto para prevenir como a consecuencia de acciones ya realizadas).
Consultoría ambiental: funciones y metodología
La consultoría ambiental, pues, tiene varias funciones tanto en el contexto interno como en el externo; sus acciones transcurren dentro y fuera del laboratorio, ya que comprenden desde la toma in situ de muestras y análisis del terreno como su posterior análisis y ejecución de resultados. Para ello, los profesionales que forman parte del laboratorio han de estar versados en diversos conocimientos que hagan posible la realización efectiva de su trabajo, así como de la experiencia necesaria para garantizar al cliente el análisis y la asesoría demandadas.
Dependiendo del contexto y de la tarea a realizar serán necesarios diferentes procedimientos y tipos de equipo, pero por norma general el objetivo final tiene su importancia en la forma en cómo logran crear una buena coexistencia entre las empresas y el medio ambiente. Sus análisis e investigaciones hacen posible el desarrollo y la evolución del ser humano en diferentes ámbitos, un avance que no es frenado por la consultoría pero que sí es acotado a las mejores soluciones posibles, es decir, a aquellas que no intervengan en el curso natural del ecosistema.
Una función esencial para el medio ambiente
De la misma manera, en caso de tener que subsanar un procedimiento que ya ha ocasionado un daño, la opinión y respaldo de la consultoría ambiental resultan vitales para reducir al mínimo las consecuencias de dichas acciones, frenando de esta manera un impacto negativo que perjudique al medio. Es por ello que una consultoría ambiental también ha de tener los conocimientos necesarios en materia legal, de manera que los estamentos marcados por la legislación sean respetados y empleados como límites a los cuales adaptarse.