Como dice David Meerman, uno de los expertos en mercadotecnia online más conocidos de la actualidad, el «marketing online consiste en proporcional al consumidor contenido útil en el momento que este lo necesita». ¿Y qué necesita el consumidor?
Ante todo, resolver un problema, responder a una pregunta y obtener lo que desea de la manera más instantánea posible.
Es aquí cuando entran en juego las técnicas más conocidas del marketing digital, principalmente el posicionamiento SEO. Porque el hecho de encontrar el sitio web que se necesita en la primera página de resultados de Google, bien visible y accesible, va completamente en consonancia con la filosofía de Meerman, que es la filosofía del marketing en internet.
Algo que hay que comprender de internet es que hay dos tipos de consumidores: los propios usuarios, que buscan utilizar un servicio de ocio y obtener un producto, y las propias empresas, que se convierten también en consumidoras cuando requieren los servicios específicos de otros profesionales.
Dichos profesionales son, lógicamente, las agencias de publicidad, que han de estar presentes en internet y en las redes sociales más conocidas si desean que su público objetivo, fundamentalmente micropymes recién nacidas o medianas empresas que necesitan consolidarse, den con ellas.
La competitividad en internet es feroz, y las agencias de publicidad no están exentas de esa realidad. ¿Qué características debe poseer una agencia de marketing y publicidad en internet para ser visible y transmitir la confianza que el consumidor necesita encontrar?
Parece obvio, pero la estética visual es muy importante. Si una agencia de publicidad demuestra que puede ofrecer servicios de branding o de construcción de marcas de calidad con la construcción de la suya propia, ganará puntos frente a una agencia cuya apariencia visual sea mediocre o no demasiado atractiva.
De igual modo, es fundamental presentar credenciales; es decir, clientes para los que se haya trabajado y un portfolio de proyectos digitales, audiovisuales o relativos a la publicidad tradicional. Mientras más servicios ofrezca, mejor. Así, los negocios que no pueden permitirse contratar en plantilla a profesionales del marketing podrán hacer uso de sus servicios y quedar satisfechos.