Llaman a la puerta de tu casa. Abres y te encuentras a una persona uniformada que justifica estar allí para realizar una revisión de tu instalación de gas. Tú la dejas pasar, a pesar de que no tenías ni la más mínima idea que tenía que venir alguien con ese cometido, y pagas en efectivo por sus servicios a pesar de que no los has solicitado. Estás siendo víctima de un fraude, uno de los más extendidos hoy en día.
El éxito de este tipo de timos radica, precisamente, en las ansias de seguridad en el hogar: tanto si se dispone de bombonas de gas como de gas canalizado, la mayoría somos conscientes de la necesidad de tener una instalación de gas segura y bien acondicionada, que funcione de manera óptima y que en ningún caso represente un peligro. Por esa razón, cuando una persona con un aspecto profesional se presente en nuestra puerta alegando una revisión y asegurando que se está llevando a cabo en todo el edificio, es natural que en muchas ocasiones nos dejemos engañar.
Los peligros de los falsos instaladores de gas
Las personas que se presentan con ánimo de realizar una estafa en tu hogar cuidan que su presencia y excusas sean lo suficientemente plausibles como para cualquiera se confíe y les deje pasar. Es por esa razón que suelen presentarse con un uniforme, incluso con certificados falsos, diciendo pertenecer a empresas conocidas del sector; cuando se topan con cierta reticencia por parte del propietario alegan que el resto de vecinos ya ha pasado dicha revisión, o que impedir su paso propiciará un corte del suministro.
El peligro de estos timadores tiene diversas caras: no solamente estamos dejando entrar a nuestro hogar a personas con intenciones dudosas, que pueden proceder fácilmente a sustraernos objetos de valor en un despiste: normalmente, estas personas justifican un coste por la revisión y solicitan su pago en efectivo; incluso pueden llegar a aceptar descuentos con tal de salir de tu hogar con dinero en efectivo. Al margen de esto, existe el peligro que estas personas, sin ninguna formación, manipulen tu instalación de gas provocando verdaderos daños que generen fallos de seguridad.
Detectando falsos revisores
Con tal de salvaguardar nuestra seguridad de estos estafadores, hay toda una serie de aspectos que debemos tener en cuenta para evitar timos. En primer lugar, si tenemos un suministro a base de bombonas de butano o de propano, la responsabilidad es puramente nuestra: eso quiere decir que somos nosotros quienes debemos contactar con una empresa para que realice una revisión cuando lo consideremos necesario. Cuando una persona se presente en nuestro hogar sin que nosotros hayamos contratado ningún tipo de servicio, alegando acciones como cambios de gomas y/o revisiones, lo más probable es que nos encontremos ante un timador.
En el caso de disponer de un suministro de gas canalizado en nuestro hogar, puede darse la situación que la empresa realice una inspección (cada cinco años, aproximadamente) si nosotros no hemos contratado una revisión por nuestra cuenta. Sin embargo, en cualquier caso, la empresa deberá avisar con antelación del día y hora de la visita, y en ningún caso deberás pagar la visita cuando ésta llegue, sino que se añade a la factura del gas. En cualquier caso, si no tienes la seguridad absoluta de que la persona no sea un timador, avísale que no pagarás nada por su visita, sino que simplemente firmarás conforme ha realizado ese servicio.
En el caso de la caldera de gas, igual que en el resto de las instalaciones, será necesaria una revisión regular para garantizar el buen estado de las instalaciones; sin embargo, como sucede con las bombonas, el consumidor constituye el pleno responsable de concertar dichas revisiones. Por lo tanto, hay que desconfiar siempre de este tipo de visitas “sorpresa”, asegurarte de que el profesional es quien dice ser si contratamos nosotros el servicio y tan sólo pagar en caso de que éste realice algún tipo de reparación y nosotros estemos de acuerdo.
Para tu seguridad, existen empresas colaboradoras de distribución de Gas Natural de las que tenemos testimonios de su eficiencia y seguridad, como en el caso de las opiniones Urbangas. Sea como sea, asegúrate siempre de no ser objeto de un timo.