Si tenemos niños pequeños en casa, sin duda estarán tristes porque el Día de Reyes, una fecha mágic, ha llegado a su fin. Pero si queremos volver a levantarles el ánimo, solo tenemos que hablarles de un posibilidad futura y no muy lejana: las vacaciones de verano. Las cuales, por cierto, bien pueden ser en un destino tan excepcional y bello como Menorca.
La isla en cuestión ofrece numerosas opciones de ocio y relax para los adultos, pero no se queda atrás en absoluto en cuanto a vacaciones en Menorca con niños. Para ellos y ellas, desde los más tranquilos hasta los más revoltosos, hay también alternativas familiares o que se adaptan de maravilla a esas edades tan inocentes y enérgicas. Veamos, pues, algunos de los mejores ejemplos.
· Parques de atracciones acuáticos: ¿Hay algo más fabuloso para un niño que pasarse un día en remojo en verano y, para colmo, mejorar su diversión con una serie de divertidas atracciones? Será difícil encontrarlo, ya que si vamos al parque acuático Marina Parc o a Aqua Center Menorca, es posible que no quieran irse hasta el anochecer. Además, los adultos también pueden pasárselo en grande en cualquiera de ellos.
· Playas llenas de encanto y diversión: Al hablar de unas vacaciones en Menorca con niños, no podemos dejar de mencionar sus asombrosas playas. Evidente y, por supuesto, entretenido. Mientras padres y madres toman el sol , los niños pueden hacer castillos de arena; y para eventos en familia, podemos practicar kayak y otros deportes acuáticos en la cota de Es Grau, o almorzar en un chiringuito en Sant Tomàs.
· Hoteles y villas con todo incluido: ¿Cómo podemos obviar unas vacaciones en Menorca con niños sin mencionar el mejor alojamiento posible para pasar los ratos de descanso? No faltarán hoteles con bufetes y desayunos completos, aunque, sin duda, lo más familiar es una villa lujosa y hogareña con su propia piscina. Así, los más pequeños no se aburrirán en ningún momento del día.
· Diversiones urbanas: Si visitamos Ciutadella y su bello puerto, no solo los mayores quedarán encantados, sino los niños al ver pasar los barcos y las barquitas. También pueden correr y explorar por pueblos tan hermosos como Fornells o Binibeca.
Queda claro que unas vacaciones en Menorca con niños dan mucho de sí. Lo difícil, eso sí, será que los benjamines de la casa decidan qué les ha gustado más de esta preciosa isla.
