Los proyectos arquitectónicos son tan diversos como los propios materiales que se emplean en ellos, que dependen, en última instancia, del objetivo con el que se planee fabricar un inmueble determinado. Sin embargo, otros factores entran en juego también y con la misma importancia e intensidad. Por ejemplo, el coste y el presupuesto económico del que se parta, la ubicación de la construcción y el precio del suelo, etc. Es importante tener en cuenta, por lo tanto, que a la hora de planificar la construcción de un edificio o nave industrial, todas estas variables deben ser estudiadas a fondo y muy tenidas en cuenta para, así, seleccionar los materiales necesarios.
Por ejemplo, debemos considerar comprar puertas y ventanas, que, más que materiales propiamente dichos, son elementos indispensables en cualquier tipo de planificación arquitectónica. De hecho, si ya de por sí la ventilación natural de espacios personales o de trabajo era fundamental, ahora, con la pandemia del coronavirus en ciernes, proveer de esa necesidad a los edificios es crucial. La alternativa B es la instalación de aire acondicionado, que filtra y limpia el aire, pero supone un incremento de los gastos y no todos los presupuestos de construcción iniciales están preparados para asumirlos.
El problema de la ventilación, en cualquier caso, depende de manera directa de la acción de comprar ventanas que se adapten al cien por cien al espacio en sí. Pueden ser modelos estándar normalizados en el caso de bloques de viviendas, y ventanales elevados en lo que respecta a naves industriales. En este último caso, puesto que hablamos de áreas especialmente afectadas por el calor de la maquinaria y la actividad humana, es especialmente importante que las ventanas y las puertas estén reforzadas, y también otros elementos básicos. Por eso, por ejemplo, podemos investigar los perfiles galvanizados y otro tipo de facilidades materiales técnicas.
Si la labor de planificación e investigación inicial se hace de manera correcta y prevemos con antelación todas las posibles contingencias a las que puede verse expuesto un edificio y las personas que lo vayan a utilizar con frecuencia, la construcción culminará sin contratiempos.